1- Los temas son los que preocupan al país, a la sociedad. La violencia, la política, la migración, las redes sociales. Poco queda de otras muestras donde lo personal era más evidente. Al jurado le interesa mostrar esos temas, no entro a pensar demasiado que tan a fondo se tratan ¿hablar de los temas ayuda? ¿exorciza o nomás calma?
2- Pienso que algo del norte se deja sentir. Cierta parte de los expositores son del norte (o eso creo) y estos artistas cuentan la violencia y los curadores del centro cuelgan las obras. Una especie de hilo conductor de producción y consumo del norte al centro, quien sabe.
3- Muchas obras solo funcionan si se lee la cédula, pareciera que se explica todo en estas cédulas y que si uno no las lee pues se pierde de algo ¿El arte moderno como el máximo arte pedagógico?
4- Me da risa la cédula de una obra en la que la autora graba los movimientos involuntarios de las piernas de su padre que sufrió un accidente. La artista aclara que lo grabó sin su consentimiento. Imagino que la artista piensa: Eres mi padre, soy artista y te jodes y te grabo. El padre podría ir al centro de la imagen a hacerle algo a la obra, siento que cerraría el circulo arte-parientes.
5- Me llama la atención una obra de fotografías tomadas de la cuenta de Flickr del exgobernador de Sonora. El resultado no es tan bueno visualmente, pero tiene cierto ingenio como idea.
6- Me dedico a leer varias cédulas y veo que los artistas ahora reflexionan, analizan, catalogan, etc parecen más investigadores, o estudiantes haciendo su tesis de maestría que artistas visuales.
7- Recorro la Bienal pensando ¿que fotografías colgaría en mi oficina? si tuvieras oficina y dinero para comprar las obras? Un criterio de selección clásico. Pienso que dos obras me gustan, Dos fotografías enormes de puros colores, pura abstracción y otras dos fotografías de llantas quemándose en sembradíos del norte. Creo que las colgaría en mi hipotética oficina por su tamaño y cierto sabor a obras fotográficas más convencionales.
8- Al ver las obras veo también como los materiales y su armado ya no son un problema. Marcos perfectos, todo tipo de impresión de calidad, Montajes de video, etc. Podemos discutir los temas y si tienen sentido o gracia las obras, pero los acabados ya tiene un mínimo comercial.
9- Siento que falto más obra como para llamar Bienal a la bienal, puede que ingenuamente piense que si el país es grande hace falta más espacio para más obra.
10- Ahora, después de la visita leo que levantó polémica la Bienal. Yo que ahora vivo fuera de la CDMX, pienso que el principal problema más allá de que gusten o no la selección es pretender que una sola Bienal muestre o refleje todo el trabajo fotográfico del Pais. El centralismo y el centralismo del centralismo es pensar que en los pocos metros cuadrados del centro de la imagen se puede reflejar toda la foto que se saca en México, si es que esa pudiera ser la intención de una Bienal.