Por un lado tenemos el mito del lugar de trabajo como espacio místico y personal el cual es cultivado y decorado al infinito para lograr el ambiente ideal en el que se puede trabajar a gusto y de manera muy personalizada, del otro extremo tenemos el espacio de trabajo de Linus Torvalds, el creador de linux. Su espacio de trabajo es una caminadora con monitor y un escritorio lleno de basura electrónica, años de gadgets que el señor Torvalds no se decide a tirar.
Al mirar ese video sobre el lugar de trabajo de Linus Torvalds, primero me sorprendí, pensé que alguien que crea un sistema operativo tendría 8 monitores planos y una gran silla, una especie de centro de control de linux, pero no, el espacio es tan extraño, tan carente de interés por parte de su dueño. Mi hipótesis es que el espacio donde trabajo le es muy indiferente, su interés esta en la pantalla, en las ideas y procesos que controla y que el espacio de trabajo es algo muy secundario para alguien como Linus Torvalds. No se si al otro extremo está el espacio de trabajo de alguien como Adam Savage, que en parte es un espacio de exhibición.